1. Si no va a consumir la lasagna al día siguiente la puede guardar en la nevera sin necesidad de usar el congelador.

2. Si la va a consumir dos o tres dias después máximo la puede guardar y congelar.

3. Cuando la vaya a comer, sáquela de la nevera. Idealmente si la puede dejar descongelar unas horas es perfecto.

4. Precaliente su horno convencional a una temperatura de 180º durante 15 min.

5. Abra el horno y meta la lasagna. Dele el tiempo que sea necesario hasta que usted vea y sienta por el aroma y la textura que ya esta lista y caliente. No la doré porque puede quemar la capa superior y se pueder tornar dura. 6. Si le quedaron tajadas de pan con mantequilla con ajo, déjelas en la cajita azul que le hemos proporcionado envueltas en plastico para que no se endurezcan y caliéntelas en horno convencional en bajito.